Predicción de la mortalidad a un año mediante cinco instrumentos de medición de la fragilidad: estudio comparativo en pacientes geriátricos hospitalizados

M. Ritt, L.C. Bollheimer, C.C. Sieber, K.G. Gaßmann

Arch Gerontol Geriatr. 2016;66:66-72

En este análisis prospectivo se incluyeron 307 pacientes (≥65 años) hospitalizados en el servicio de geriatría. Durante la estancia del paciente en el hospital, el síndrome de la fragilidad fue evaluado usando diferentes instrumentos: índice de fragilidad de cincuenta ítems (Frailty Index o FI), índice de fragilidad de diez dominios sumadas a la de co-morbilidad basado en una evaluación geriátrica integral estandarizada (FI-CGA), la Escala de Fractura Clínica de 9 categorías (CFS-9), la CSHA basada en reglas de definición de la fragilidad (CSHA-RBFD), y el fenotipo de la fragilidad (FP). El seguimiento de estos pacientes fue de un año.
 
Se obtuvieron datos de seguimiento de 305 de los 307 participantes. Sesenta y dos participantes (20,3%) murieron después del seguimiento. Los instrumentos FI, FI-CGA, CFS-9, CSHA-RBFD y FP fueron capaces de discriminar entre los pacientes que murieron y los que sobrevivieron durante el seguimiento (áreas bajo las curvas ROC: 0.805, 0.808, 0.852, 0.703 y 0.757, respectivamente, todas P <0.001). CFS-9 mostró una mejor capacidad discriminativa de la mortalidad en un año en comparación con FI, FI-CGA, CSHA-RBFD y FP (todos con P <0.05). No hubo diferencias entre la capacidad discriminativa en la mortalidad a un año de FI y FI-CGA (P = 0.440). CSHA-RBFD y FP demostraron una capacidad discriminativa comparable (P = 0.41) y, si se compara con CFS-9, FI y FI-CGA, una capacidad discriminativa inferior en la mortalidad a un año (P <0.05 en todos ellos).
 

Observaciones:La Escala de Fractura Clínica (CFS), que, en comparación con los otros instrumentos de fragilidad evaluados en este estudio, tiene en cuenta también, entre otros aspectos, el criterio de los médicos en cuanto a la esperanza de vida restante del paciente, mostró, en nuestra cohorte de pacientes mayores hospitalizados en el servicio de geriatría, una capacidad superior de predecir la mortalidad a un año, en comparación con: el índice de fragilidad de cincuenta ítems, el FI-CGA de diez dominios+comorbilidad, la definición de la fragilidad basada en las reglas de la CSHA, y el fenotipo de la fragilidad. En consecuencia, la Escala de Fractura Clínica podría ser la herramienta de primera elección para estimar la mortalidad a un año mediante el uso de un instrumento para la medición de la fragilidad. El índice de fragilidad de cincuenta ítems y los diez dominios+comorbilidad FI-CGA podrían ser alternativas valiosas y exahustivas.